
En su primer discurso sobre el Estado de la Unión tras haber sido reelecto en la presidencia de los Estados Unidos, el presidente estadounidense Barack Obama, delineó sus prioridades legislativas para este año, entre las que se destaca la reforma al sistema migratorio.
Durante su discurso el presidente estadounidense señaló que el fortalecimiento de la economía pasa por aprovechar “los talentos e ingenio de los inmigrantes que se esfuerzan con esperanza” por lo que pidió al Congreso a que le envíe en los próximos meses una ley de reforma, que incluya una vía hacia la ciudadanía para los once millones de indocumentados en Estados Unidos. “Envíenme un proyecto de ley para una reforma migratoria integral en los próximos meses y yo la firmaré de inmediato”, aseguró Obama.
El mandatario destacó que una “verdadera” reforma migratoria integral equivale a una mayor seguridad fronteriza, algo que su Gobierno ha hecho mediante el mayor desplazamiento de agentes en la frontera en la historia de EE.UU., y una reducción de los cruces ilegales a sus niveles más bajos en 40 años.
Esa reforma, continuó, también debe establecer “una vía responsable” que permita a los inmigrantes indocumentados “ganarse” la eventual ciudadanía estadounidense. Para lograr la legalización y eventual ciudadanía los indocumentados deberán someterse a una revisión de antecedentes penales, pagar impuestos y una multa “sustancial”, aprender inglés y “ponerse al final de la cola” de quienes intentan emigrar a EE.UU. de forma legal, advirtió Obama.
Además, esa reforma debe corregir el sistema de inmigración legal, de manera que se reduzcan las demoras en los trámites, “se reduzca la burocracia” y el país atraiga a emprendedores con altas destrezas laborales y a ingenieros que “ayudarán a crear empleos y crecer nuestra economía”.
Obama señaló que la reforma migratoria integral cuenta con el respaldo de líderes del sector privado, de los sindicatos, agencias policiales y comunidades de fe. En la actualidad, grupos bipartidistas en ambas cámaras del Congreso trabajan “diligentemente” para elaborar un proyecto de ley destinado a reformar el sistema de inmigración, y “aplaudo sus esfuerzos”, dijo Obama.