El año pasado, un grupo de conocedores del mercado del arte y de las subastas a nivel internacional decidió abrir la primera y hasta el momento única casa de subastas que existe en Colombia. Se trata de Bogotá Auctions, que realizará su tercer gran evento el próximo lunes 9 de febrero, en el Club El Nogal, en Bogotá.

En este corto tiempo de estar funcionando el balance es positivo, explican Benjamin Creutzfeldt y Timothée de Saint-Albin –martillo y director de Bogotá Auctions, respectivamente– quienes afirman que se ha vendido “un poco más del 50 por ciento de los lotes, lo cual es bueno para arrancar”, pero añaden que a futuro es necesario mejorar esa cifra.

 

Para ello, se han puesto a la tarea de abrirse a diferentes públicos y de acercar los términos de una subasta a quienes están interesados en conocer cómo funciona una actividad de este tipo, en adquirir arte o en iniciar su propia colección.

 

Por ejemplo, para la subasta que viene invitaron a la gente a que llevara sus obras para una tasación o avalúo gratis, lo que incrementó el número de piezas recibidas: “A diario nos llegaron obras a través de internet o a nuestra oficina, no solo de Bogotá sino de otras partes del país y del exterior”, comenta de Saint-Albin.

También destacan que el hecho de que empiecen a hacerse subastas de este tipo ayuda a que existan precios de referencia de artistas colombianos y que sirvan para aumentar el interés de galerías, museos y coleccionistas de fuera de Colombia.

 

La selección de obras para esta subasta estuvo a cargo de Camilo Chico, quien escogió a 68 artistas, entre pintores de inicios del siglo XX, referentes del arte moderno y contemporáneo colombiano y artistas de otros países.

 

Esa selección también corresponde al interés de ampliar el espectro de posibles compradores, pues así como hay litrografías como Pedrito, de Fernando Botero, es posible adquirir piezas de Alipio Jaramillo, Pedro Alcántara, Carlos Granada y Ricardo Gómez Campuzano.

 

O piezas más recientes como Ornitólogo, de Pedro Ruiz; Imperio, de Carlos Castro –una perra disecada de forma tal que representa la manera como Luperca amamantó a Rómulo y Remo– o Decoración de interiores, de Beatriz González, en donde aparece el expresidente Julio César Turbay en una fiesta.

 

Dice Creutzfeldt que conseguir obras no es difícil, pero obtener aquellas piezas que puedan gustar o suscitar un interés de compra es más complejo.

Por eso, aunque recibieron una numerosa cantidad de obras para la venta, decidieron mantenerse en una cantidad mediana.

 

Y si bien Bogotá Auctions se ha enfocado en subastar arte colombiano y latinoamericano, la idea a futuro es ofrecer otro tipo de piezas, como antigüedades.

Quienes se encuentran fuera de Bogotá o prefieren participar en la subasta de forma no presencial, pueden hacerlo ingresando a: www.liveauctioneers.com

¿Cuándo y dónde?

9 de febrero. 8 p. m. Club El Nogal. Cra. 7 n.º 78-96. Bogotá. Informes: www.bogotaauctions.com

Fuente

El Tiempo